viernes, 25 de julio de 2025

RESEÑA DE "LOS MISERABLES" DE VÍCTOR HUGO

 Sinopsis. 

Entre 1789 y 1850 Francia se tambalea: la revolución de 1789-92 acaba con el llamado Antiguo Régimen y salen a la luz las ideas del liberalismo y la ilustración. Alrededor de 1800 Napoleón Bonaparte se convierte en un gran emperador liberal despertando simpatía en unos y rechazo por otros hasta su caída en Waterloo en 1815. A partir de esta fecha, los antiguos monarcas europeos, entre los que se encuentra Luis XVIII, tratarán de recuperar ese antiguo régimen, pero para entonces las ideas liberales han calado hondo en la sociedad, sobre todo entre la juventud lo que causará las revoluciones de 1830 que terminará con el éxito de los liberales consiguiendo una monarquía parlamentaria. 

Este va a ser el escenario de Los miserables y los personajes que integran la novela como Jean Valjean, Fantina, Cosette, Javert, la familia Thenardier, Marius de Pontmercy, entre otros y van a ser sus historias y sus acciones las que nos van a mostrar la historia o, mejor dicho, las historias, de la primera mitad del siglo XIX en Francia.

Personajes. 

Jean Valjean es el sustento de una familia muy pobre. Por desgracia, nunca pudo educarse y tiene un trabajo muy duro. Por cuestiones ajenas a él, en invierno se queda sin trabajo por lo que deja de poder alimentar a su familia y acaba robando un pan en una tienda para comer, pero es cogido por el panadero que le entrega a la policía, le caen cinco años de cárcel. Al cuarto año intenta escapar para seguir siendo sustento de su hermana y sobrinos, pero le atrapan y se le acrecienta la condena, y esto ocurre en dos ocasiones más, por lo que acaba alargándose hasta más de diez años. Este tiempo en prisión tiene un efecto psicológico en Jean Valjean tal que llega a la conclusión de que es malvado, lo que hizo no estuvo bien y podría haber actuado de otra manera, e incluso compara ese robo con "coger a la sociedad entera por el cuello". 

En este punto podemos empezar a entrever que Jean Valjean no es exactamente como se nos cuenta al inicio del libro que es como un ex presidiario criminal, sino que, como veremos hace cosas verdaderamente buenas por los demás. Sin embargo, después de tantos años señalado como criminal, termina por verse a sí mismo como tal y, en ocasiones incluso se comporta de un modo que apunta completamente a ello. Al inicio de la obra él busca cobijo pero todos le reconocen como ex presidiario y nadie quiere alojarle hasta que llega a una iglesia donde reside un obispo, monseñor Bienvenido, quien le recibe bien le da comida y cobijo, pero esa noche, Jean Valjean le roba los objetos de plata, pero Bienvenido le perdona e, incluso se los entrega, a cambio de emplearlo para hacerse un hombre honrado. Jean Valjean entra entonces en crisis: él ya se creía un hombre malo, un criminal, pero por una vez, una persona le ve solo como a un hombre que, además, le perdona. Esto crea una crisis interna en Jean Valjean: por un lado desea vengarse de la humanidad por el sufrimiento que ha tenido que padecer, por otro, no puede evitar recordar cómo le ha tratado el sacerdote y lo que pedía a cambio, con el tiempo vemos que cumple su promesa, pues termina, bajo otra identidad, siendo el alcalde de un pueblo en el que hace una gran inversión dándole prosperidad y trabajo a todo el que lo necesitaba. Jean Valjean no deja de ser entonces un personaje complejo, pero que tiende al bien en el momento en que deja de ser visto como un malvado. Es más, rescata a Cosette de los Thenardier y la adopta, la cuida como su padre, le procura educación y una buena vida, dándole todo aquello que él no tuvo viviendo para ella.

Javert. Javert es inspector de policía. Es un hombre recto que, sin embargo, termina cegado por su propia rectitud. Su obsesión por el cumplimiento de la ley y las normas le llevan a ser maniqueísta y creer únicamente en "buenos" y "malos", "gentes de bien" y "miserables", llegando incluso a ser cruel con aquellos que él considera malvados. Por otro lado, este maniqueísmo le lleva prácticamente al clasismo, de modo que le hace entender que la palabra de una persona "de bien" de "dentro de la sociedad" vale más que la de aquellos que están "fuera". Esto es lo que ocurre cuando ve a Fantina agredir a un joven estudiante después de que éste, para reírse de ella, le echara nieve debajo de la ropa. Javert ve la agresión y quiere encarcelar a Fantina solo porque ve que es prostituta. El alcalde de M. ordena liberarla y esto es lo que piensa Javert al respecto: 

  "vuestra bondad [dice refiriéndose a Magdalena, alcalde de M.] me ha producido demasiada rabia  cuando la ejercitáis con otros, no la quiero para mí. La bondad que le da la razón a una prostituta contra un ciudadano, a un policía contra un alcalde, al que está abajo contra el que está arriba, es lo que yo llamo mala bondad. Con ella se desorganiza la sociedad."

Con esto podemos decir que Javert no ve más allá de sus narices, es incapaz de observar la complejidad de las propias personas y verlas en su contexto, incluso cuando conoce las circunstancias de esa persona, lo cual ocurre con Fantina, ella le explica cómo ha acabado en esa situación cuando la encierra, pero es incapaz de sentir piedad por ella, de creerla o comprenderla,  y esto le acabará provocando una crisis más tarde cuando, al poder por fin atrapar a Jean Valjean, le deja escapar y acaba con su propia vida.

Fantina. Acabamos de mencionar a este personaje más arriba como una prostituta a la que Javert quiere aprisionar, pero ¿de dónde sale? ¿quién es? Fantina es una joven campesina que se queda embarazada y, el padre, del que no se dice nada en toda la novela, la abandona, no se dice de forma explícita pero todo apunta a un enamoramiento y, en cuanto el padre sabe que Fantina está embarazada, desaparece. Lo que sí sabemos es que Fantina cuando nace su hija debe dejar de trabajar para cuidarla y, al cabo de unos años, nadie quiere darle trabajo lo que la obliga a salir de su pueblo, pero debe hacerlo sola ya que las madres solteras no están bien vistas en la sociedad. Deja entonces Fantina a su hija con una familia, los Thenardier, que le dicen que cuidarán de la niña, pero debe pasar una pensión de gastos ya que ellos no son ricos. Fantina acepta y consigue un trabajo en M. en una fábrica. Fantina manda puntualmente la manutención de su hija, Cossette, pero los Thenardier cada vez le exigen más dinero que usan para pagar sus propias deudas y maltratan a Cossette. 

Si esto es poco, en la fábrica se enteran de que Fantina tiene una hija y es despedida por la mala fama de ser madre soltera, mientras, los Thenardier le piden más dinero y Fantina vende todo cuento tiene: pelo, dientes e incluso su propio cuerpo, y es en esos momentos cuando la encuentra Javert. 

Si echamos un vistazo vemos que Fantina no es una mala persona, ni siquiera una mala trabajadora, tan solo una joven víctima de los prejuicios de la sociedad y de una familia que, ahora veremos, se aprovecha de la situación. Al ser madre soltera no se le permite trabajar, ni ganar dinero ni criar a su propia hija, sino que está condenada al olvido. Fantina pasa sus últimos días enferma al cuidado de unas monjas, pero, al morir, es enterrada en una fosa común.

Los Thenardier. A parte de ser una pobre familia con demasiados hijos a los que cuidar, ¿quiénes son los Thenardier? El narrador les describe así: 

  "pertenecían estos seres a esa clase bastarda compuesta de personas incultas que han llegado a elevarse  y de personas inteligentes  que han decaído, que está entre la clase llamada media y la llamada inferior, y que combina algunos efectos de la segunda con casi todos los vicios de la primera , sin tener el generoso impulso del obrero, ni el honesto orden del burgués. Eran de esa clase de naturalezas pequeñas que llegan con facilidad a ser monstruosas. La mujer tenía en el fondo a la bestia y el hombre la pasta del canalla. Eran de estos seres que caen continuamente hacia las tinieblas, degradándose más de lo que avanzan, suceptibles de todo progreso hacia el mal."

 Es decir, una gente de clase media-baja que no tiene grandes privilegios ni holgura material y que tiende a hacer el mal. Y esto se verá cuando venden la ropa de Cosette para pagar sus propias deudas o la alimentan con sobras y ni siquiera tienen espacio para ella en su mesa, la maltratan e inventan que está enferma para que Fantina mande más dinero y, al ver que Fantina lo manda, exigen más, con las consecuencias que eso acaba teniendo para Fantina. Pero esto no es todo, después de las guerras napoleónicas vemos al señor Thenardier saqueando a los muertos en batalla, una práctica muy extendida en realidad, pero llama la atención un momento en que se queda con un anillo de un oficial que parecía muerto, pero su mano empieza a moverse, Thenardier arrastra el cuerpo para separarlo de los demás cadáveres y descubre que es un oficial y le quita la cruz de plata, una bolsa y un reloj, sin intentar comprobar si está vivo o preocuparse por él. El oficial despierta y le da las gracias sin saber lo que ha hecho Thenardier, incluso, el oficial echa en falta su reloj y Thenardier "se hace el tonto" incluso cuando el oficial se lo quería regalar, mostrando así de forma más fehaciente lo miserable que es realmente Thenerdier.

Tiempo más tarde, la señora Thenardier vuelve a quedarse embarazada de otros dos niños y al ser demasiados se deshace de ellos "con una singular facilidad", se los alquila a una vecina llamada Magnon que quiere sacar con ellos una pensión haciéndolos pasar por suyos.

Por desgracia, Magnon entra en prisión y los niños quedan solos y se pierden hasta que son encontrados por Gavroche. 

Como vemos, en general los Thenardier no dejan de ser unos personajes que parecen creados para provocarnos rechazo en la propia forma de describirlos y, en cierto modo, también Javert, y veremos luego, cómo se relaciona esto con la forma de narrar de Víctor Hugo.

Gavroche. Este es un personaje bastante secundario, pero no deja indiferente. Gavroche se describe en la novela como un joven muy pobre, pero muy generoso y compasivo, ve a los niños y sin dudarlo los lleva con él, les cuida y comparte lo poco que tiene con ellos. Roba a un ladrón llamado Montparnasse y da el dinero a un pobre señor llamado Mabeuff. Desgraciadamente, este personaje muere en las revoluciones de 1830 de unos disparos por parte del ejército.

Marius de Pontmercy.  Marius es un joven estudiante de derecho, ha perdido a su padre después de la caída de Napoleón y vive con su abuelo. Marius es un liberal y gran admirador de Napoleón y las ideas revolucionarias que trajo, pero su abuelo es borbónico y cree que los que sirvieron a Bonaparte eran "unos pordioseros, asesinos, boinas rojas, ladrones [...] Todos eran bandidos los que sirvieron a Bonaparte. Todos traidores que vendieron a su rey legítimo". Marius acaba decidiendo irse de casa con lo que tiene y termina sus estudios por su cuenta. Esta historia viene a reflejar los problemas políticos que sufría Francia en esta época entre la restauración y las revoluciones: simpatizantes de Napoleón que veían en él el símbolo del liberalismo y los monárquicos partidarios de la restauración que habían visto en Napoleón a alguien que les había robado la tierra, la soberanía, la esencia de Francia. Marius pronto se queda sin dinero para pagar su alojamiento y empieza a vivir en la calle y devuelve el dinero que le envía su familia. Marius encarna aquí la figura del joven liberal que desea el cambio, el poder para la burguesía, de hecho participa en la revolución de 1830 donde queda gravemente herido, lo que sirve de puente para reconciliarse con su abuelo. Pero ni siquiera Marius es un personaje perfecto ya que al saber quién es Jean Val Jean, aleja a Cossette de él y trata de evitarle, de lo cual se acaba arrepintiendo cuando se entera de que Jean Val Jean le había salvado la vida en la revolución, pero consigue redimirse a tiempo en el lecho de muerte de Jean Val Jean.

En la historia hay más personajes pero he seleccionado a estos porque son los que nos muestran eso que ya usaba hacer Víctor Hugo en Nuestra señora de París que es el crear personajes paradójicos, personajes que, a simple vista no parecen buenos o confiables, pero que con sus acciones a lo largo de la historia, nos damos cuenta de que eran más bien víctimas de sus circunstancias y un sistema injusto y, por el otro lado, personajes a simple vista respetables pero que para nada tienen una moral que puede considerarse aceptable e incluso terminan siendo condenados, y es que Jean Val Jean consigue redimirse en Cosette y la creación de una nueva familia, del mismo modo que Fantina que, aunque tiene una muerte bastante triste, se redime también en Cosette, Gavroche es un joven muy pobre que no duda en compartir cuanto tiene y cuidar a los más indefensos, Marius no es de familia pobre pero experimenta una pobreza terrible pero es un joven con conciencia de justicia que ama la libertad y trata con gran cariño a Cosette; mientras, por otro lado los Thenardier viven de aprovecharse de los demás y Javert es incapaz, como hemos comentado, de ver más allá de blanco y negro y sus propios prejuicios y acaba consumido por eso. Al final Víctor Hugo lo que hace es crear un juego de luces y sombras donde no hay santos y demonios, pero acaba diferenciando quién, después de todo se redime y quién no, no es moralista, pero nos deja claro quiénes deben caernos mejor y quiénes peor.

Narración. 

La historia como más que un escenario. El contexto histórico creado por Víctor Hugo no es un simple telón de fondo. Los personajes se mueven por ese contexto histórico, participan de las revoluciones, sufren las consecuencias de las guerras napoleónicas, en definitiva, se mueven por la propia Historia como si fueran personas reales del pasado y no personajes de ficción y todo esto lo consigue Víctor Hugo de forma magistral, sin sacarnos de la historia, pero también aportando información sobre la historia reciente de Francia, lo cual consigue, para mí, dar más realismo a la trama sin hacer pesada la novela de modo que parezca un libro de texto.

Estilo narrativo. La forma que tiene Víctor Hugo de introducirnos en la historia de los diferentes personajes y unirlos entre sí me parece fabulosa. Durante un tiempo seguimos a un personaje y, de repente, nos narra en otro capítulo otro acontecimiento, otra historia de otro personaje, pero poco a poco todo va cobrando sentido, todos acaban de algún modo relacionados de modo que es muy difícil en realidad distinguir entre protagonistas y secundarios, ya que todos son protagonistas en algún punto del libro. Las historias de personajes tan variopintos dan a la novela una idea de complejidad maravillosa, al mismo tiempo que no deja de entretener de modo que ninguna historia es enteramente principal ni tampoco enteramente secundaria haciendo que todo cuanto se narra se sienta real, sensible, redondo.

Opinión personal y conclusiones. Me ha encantado este libro y no puedo evitar pedir que, por favor, se siga leyendo. Cierto es que ya es un clásico canonizado y que difícilmente caerá Los miserables en el olvido, pero no puedo evitar seguir recomendándolo. Si bien es cierto que hay escenas muy duras que llenan de rabia e indignación, también tenemos momentos luminosos, historias de amor y libertad que nos pueden seguir inspirando y llenando de amor y fe en la humanidad, sí, fe en la humanidad, porque a pesar de todas las injusticias, hay personas que siguen intentando hacer el mundo un poco más justo, que todos somos miserables.

¡¡ Buen fin de semana de lecturas!!

 

 

domingo, 15 de junio de 2025

RESEÑA DE "LESTAT EL VAMPIRO" ANN RICE. ED: PLANETA DE AGOSTINI

 Lestat es un joven noble nacido en la Francia del s. XVIII poco antes de que comenzaran las revoluciones burguesas. Sin embargo, a Lestat no le interesa vivir como un noble, sino que quiere ser actor, lo que precipita su huida de casa junto a su amigo Nicolas, hijo de un burgués bien posicionado pero cuyos intereses son el violín y la música. Ambos deciden huir juntos hacia París para buscar su suerte como artistas y todo comienza a ir más o menos bien en una pequeña compañía teatral cuando Lestat es secuestrado y convertido en un vampiro.

Recomiendo muy encarecidamente este libro, es una joya. Si conocéis Entrevista con el vampiro, el libro de Lestat no os va a decepcionar pues va muy en la misma línea. Si bien es cierto que el personaje de Lestat en Entrevista nos puede causar a veces cierto rechazo por la forma que tiene de vivir su naturaleza vampírica, en este libro vamos a entender verdaderamente su carácter y todo lo que le empuja a convertirse en lo que se convierte; si, por otra parte aún no habéis leído Entrevista, recomiendo leerla antes que Lestat porque a nivel narrativo se va a entender mejor (sobre todo hacia el final). Dicho esto, ¿qué nos vamos a encontrar en esta novela?

Temas: 

Liberalismo Vs "filosofía medieval". Lestat es un personaje muy interesante aquí pues, si bien en Entrevista tenemos una imagen bastante estática de él, aquí somos más capaces de entrever su humanidad y comprender de forma más profunda su personalidad y forma de ver su naturaleza pues, a diferencia de Louis en Entrevista, Lestat asume de forma bastante temprana su nueva naturaleza vampírica y que debe alimentarse de los humanos sin que esto le convierta necesariamente en un monstruo sanguinario, de hecho, es un personaje muy reflexivo que, como veremos más adelante, se hará preguntas sobre lo que es, qué puede hacer y qué no, y sobre cómo evitar o sortear su naturaleza monstruosa y mantenerse lo más humano posible, porque, a pesar de esa monstruosidad sigue amando, ama a Nicolas, a los humanos a los que tiene que desangrar, los ama y sufre a pesar de aceptar su realidad.

Lestat, como he comentado antes, se va a hacer preguntas sobre su naturaleza y sus acciones le van a llevar a conocer a ArmandArmand también es un personaje relevante en Entrevista con el vampiro y aquí vamos también a profundizar un poco en su personalidad y a descubrir cómo, a pesar de chocar frontalmente con Lestat en su forma de estar en el mundo, ambos llegan incluso a mantener un respeto mutuo.  Y es que Armand, es muy cercano a una filosofía que nos puede recordar a la versión vampírica de la filosofía eclesiástica medieval (de forma muy resumida y simplificada) pues él se mueve en el mundo de los aquelarres de vampiros prefiriendo alejarse del mundo humano amparándose en una serie de tradiciones, creencias y tabúes que nos pueden recordar a la percepción moderna que se tiene de la edad media europea: una sociedad oscura, cerrada, supersticiosa, etc.; en contraposición con Lestat, que se muestra como un hijo de la Ilustración, el racionalismo e incluso roza el liberalismo romántico, contradiciendo las razones del aquelarre asumiéndolas como ilógicas ¿qué sentido tiene alejarse de los humanos y el mundo humano? ¿no es así, a fin de cuentas como mejor puede cazarse? ¿Moviéndote entre ellos vistiendo como ellos viviendo como ellos? Pero Armand le advierte sobre un peligro que empaña esa lógica: moverte entre los humanos, asumirte a ellos solo provoca que los termines amando y la pena por matarlos te haga preferir morir. Esta es una de las grandes dicotomías filosóficas de la novela, la oposición entre estos dos personajes que refleja, a su vez, la oposición entre estas dos filosofías.  

El segundo tema que atraviesa la novela es el concepto del "jardín salvaje". En la filosofía ilustrada para marcar la diferencia entre la barbarie y la civilización (que por supuesto se encarnaba en Europa) se hacía un símil entre "la selva" y "el jardín" ambos se forman con seres naturales como las plantas o los insectos pero, mientras la selva es caótica, salvaje, indómita e impredecible (casi irracional), el jardín, por su parte, es una naturaleza ordenada, limpia, controlada. En el jardín elegimos qué se planta, cómo crece,  cómo se poda, se acomoda, se domina a la naturaleza. Bien, aquí, la naturaleza del vampiro se liga continuamente al concepto de "jardín salvaje" es decir, el vampiro es un ser que puede ser "civilizado" moverse en sociedad, con la sociedad, sin perder su parte salvaje, animal que bebe sangre humana y vive de noche. Según este concepto, el bien y el mal no existen como tal, no hay un mal en el vampirismo ni tampoco un bien, es una forma más de la naturaleza, de existencia y es una idea que me ha encantado en la novela. Lestat es precisamente el gran representante de este concepto en su lucha contra la renuncia al mundo humano. Esta idea del jardín se mezcla, además, en la novela con ciertas ideas de lo estético, es decir todo en el mundo se mueve por razones estéticas, y hay belleza y estética en la propia naturaleza vampírica y en esa naturaleza que se mueve entre lo civilizado y lo salvaje.

El tercer tema es de los más interesantes del libro: el amor que tiene Lestat a los humanos. Como he mencionado antes, Lestat, a pesar de su naturaleza, ama a los humanos y esto se le reprocha desde algunos círculos vampíricos como el de Armand, porque amar a los humanos puede provocar la extinción de la especie. Armand entiende que si amas a los humanos acabarás por compadecerte de su muerte hasta preferir no alimentarte de ellos y morir. Sin embargo, Lestat no lo ve así, Lestat sí ve una convivencia entre ambas formas de pensar y esto nos lanza la pregunta: ¿se puede amar a algo de lo que te alimentas y a lo que debes provocar la muerte? ¿si nos alimentamos de patos podemos decir que amamos los patos? La verdad es que me parece este un planteamiento muy interesante pues es algo que, sobre todo cuando había matanzas de animales de granja, se vivía en muchas familias y aún hoy puede dar que pensar.

Un cuarto tema bastante recurrente en el libro es el de la soledad. Si bien Lestat no es el único vampiro que existe y podemos contar con aquelarres como el de Armand, en un momento dado, Marius nos advierte que el vampiro es un ser solitario y tiende a ser muy individualista, por lo que los aquelarres como el de Armand realmente son una excepción, y esta soledad también atraviesa la obra pues, si bien parece que la naturaleza del vampiro es solitaria, Lestat sí siente la necesidad de compañía o, al menos sí siente esa soledad con el paso de los siglos. Y es que la inmortalidad puede terminar haciéndose muy solitaria cuando pasa el tiempo y te rodeas de humanos mortales a los que vas a ver morir una y otra vez, pero también cuando sientes que los demás inmortales de tu entorno no comparten tus valores ni tu forma de vivir. Lestat se siente solo si se aleja de los mortales porque toda su vida mortal se ha enfocado en rodearse de ellos, sobre todo como actor, y esta puede que sea la razón por la que, a diferencia de otros vampiros que prefieren seguir siendo "leyendas" y "cuentos" para los humanos, Lestat prefiere mostrarse ante ellos, porque no quiere vivir ocultándose de la humanidad y perderla y aquí se me permitirá una digresión que puede hacer entender esto mejor:

La antropología hace tiempo que ha demostrado que los humanos somos seres sociales, gregarios, dependemos unos de otros, nos necesitamos tanto material como emocionalmente, y Lestat nace humano y aunque asume rápidamente que debe alimentarse de otros humanos, no se desprende de su humanidad a diferencia de los otros vampiros, incluido Marius, que sí que habitan solos y esto es lo que le hace sufrir, como hemos visto, por tener que alimentarse de ellos o tener que ocultarse.

Un quinto tema que me ha llamado la atención es el uso del lenguaje dentro de la comunidad de los vampiros. La mayor parte de las ocasiones, los vampiros se comunican mentalmente con una especie de "telepatía" que suele consistir más en un intercambio de imágenes mentales que el uso de pensamiento verbal. A través del envío de imágenes de sus recuerdos o sus pensamientos los vampiros expresan sus emociones, deseos, etc. Es un método que Lestat realmente no utiliza demasiado, lo cual puede ser otra de las razones por las que no termina nunca de sacudirse su humanidad, pues el lenguaje es una de las cosas que nos hacen humanos, de hecho, Marius también prefiere usar el lenguaje verbal y tampoco se mueve "como una sombra" como hacen otros vampiros, sino que camina como un humano, lo que hace que, como veremos Lestat empatice mejor con Marius que con Armand.

Sexto: La inmortalidad. Distinguimos aquí dos formas en que se presenta la inmortalidad: como condición de sufrimiento perpetuo. En esta novela los vampiros pueden continuar viviendo incluso en condiciones en las que el cuerpo, claramente no debería vivir. El cuerpo del vampiro puede quedar destrozado, como ocurre con un viejo vampiro que, por circunstancias que hay que leer para entender, queda en un estado físico lamentable, prácticamente aplastado con el cuerpo destruido, pero no puede morir, sino que queda para siempre en ese estado y tampoco puede repararse su cuerpo quedando en permanente estado de dolor. Con este suceso Lestat se cuestiona sobre el verdadero peso que tiene su inmortalidad si tuviera alguna vez que vivir eternamente en un dolor continuo, y esta duda nos la traslada también como lectores. 

Inmortalidad como oportunidad para aprender del mundo. Es habitual en nuestra tradición denostar la inmortalidad por ser una condición que, tarde o temprano, te hace cansarte de la vida. Hay innumerables obras de ficción que se refieren a la inmortalidad como un castigo que conlleva una pérdida continua de seres queridos, un cansancio de la propia vida que termina por dejar de ser interesante porque eres capaz de vivirlo todo, tienes el tiempo del mundo y ya has leído todo lo legible, visto cada rincón del planeta, etc. y la vida inmortal se acaba haciendo vacía. Este modo de ver la inmortalidad es ya prácticamente un tropo más en nuestra cultura, sin embargo, a través de Marius, tenemos una visión nueva de la condición de inmortal, y es que Marius, a pesar de haber vivido desde el alto imperio romano hasta el siglo XVIII, dice que no se cansa de vivir, es más, siente curiosidad por lo que vendrá del futuro, hacia dónde irá la sociedad, en qué nos convertiremos como grupos humanos, un giro que, desde mi punto de vista me hace preguntarme si la inmortalidad, a pesar del dolor, las pérdidas, etc. puede acabar mereciendo la pena.

Hasta aquí los que he considerado grandes temas del libro, ahora hablaré más en profundidad de los personajes:

 Si bien los personajes que ha creado Ann Rice no son estereotipos, sino personajes bien redondos con su propia historia, sí me ha parecido que cada uno parece moverse por la filosofía predominante de su tiempo: 

Marius, un romano del imperio, parece ser un personaje en ocasiones sacado de una tragedia de la antigüedad, pero mezclado con cierto estoicismo, es alguien que acepta el mundo tal y como es y pretende vivir en paz tanto consigo mismo como con la protección del mundo de los vampiros. 

Armand parece relacionarse de forma muy estrecha con la filosofía eclesiástica medieval por su forma de organización en un aquelarre cuyos miembros parecen más devotos de un líder espiritual con una serie de mandamientos fijos en relación a su forma de vivir y relacionarse con el resto de criaturas del mundo (no es una clasificación muy exacta, pues todos sabemos que la filosofía medieval fue muy diversa, pero aludo en este caso a algo muy general relacionado con la percepción esquemática de esta filosofía). 

Lestat, por su parte, es un claro hijo de la Ilustración, razón por la cual es posible que se muestre con más roces hacia Armand y, a su vez, se sienta mucho más cercano a Marius, pues una de las cosas que reprocha a Armand es que no le permita tener la libertad de vivir cerca de los humanos o tener su propia individualidad. Armand le propone en varias ocasiones que se una a su aquelarre y a sus normas, pero Lestat siempre le rechaza precisamente porque no quiere renunciar a esa libertad individual tan característica del liberalismos dieciochesco y que tanto se distancia de la mentalidad de grupo, de estamento de la edad media a la que Armand parece más cercano.

Nicolas es un personaje que, desde el inicio, parece darnos indicios de un acercamiento entre el pesimismo romántico y el nihilismo, ya que a menudo tiene una actitud más bien pesimista hacia la vida y sus propias metas. Si bien adora su violín, es incapaz de creer en que pueda tener éxito en su vida, sino que todo cuanto haga estará abocado al fracaso y a la caída y, como ocurría en las mentes de algunos de los románticos más radicales, esas ideas que acaban convirtiendo un poco en una profecía autocumplida.

Gabrielle pasa un poco por un personaje secundario, pero me llama mucho la atención cómo su transformación en vampiro llegó a liberarla tanto física como psicológicamente. A Gabrielle la conocemos muy enferma, casi al borde de la muerte y es la única persona que ha apoyado a Lestat y le ha cuidado verdaderamente en su infancia, por lo que ambos tienen un gran vínculo. Lestat la convierte precisamente para evitarle el sufrimiento y la inminente muerte que trae la enfermedad y, una vez convertida, Gabrielle solo desea liberarse. Como mujer noble francesa del  siglo XVIII, Gabrielle ha tenido una vida bastante vacía. Lestat dice que siempre la ve leyendo, pero es que no puede hacer otra cosa con su vida. Convertirse en un vampiro y tener que vivir al margen de la sociedad supone para ella una liberación, como soplar las velas de los dieciocho años, por lo que ahora desea hacer todo aquello de lo que se le privó desde su juventud. Es muy interesante porque una vez convertida casi se convierte más en una amiga para Lestat más que una madre, de hecho, en un momento dado ella misma se niega como madre de Lestat, no porque no le ame, sino porque dejan de tener esa relación, son más confidentes de su experiencia como vampiros "jóvenes" que una relación de madre-hijo y esto puede que explique que se acaben separando definitivamente.

Esto es solo un resumen general, una guía que lo que mueve a cada personaje en sus decisiones, pero, como he mencionado, estos personajes no son planos y pueden en algunos momentos "no encajar" en estas filosofías, sin embargo, he querido hacer esta clasificación (que, por cierto, es subjetiva) para guiar un poco en los razonamientos de cada personaje y cómo toman sus decisiones.

Como conclusión, definitivamente creo que es un libro que merece mucho la pena. Está lleno de información y de sensibilidad, los personajes son redondos, emotivos y es fácil empatizar con ellos a pesar de no ser humanos y llevar a cabo actos que nos podrían parecer terribles en un primer momento, pero creo que la magia que hace Ann Rice está justo en esto, es capaz de hacer unos personajes tan carismáticos y llenos de experiencias, emociones y pensamientos que es muy fácil pasar a segundo plano el hecho de que se alimenten de sangre humana. Las escenas de cacería y succión de sangre pasan desapercibidas casi como una acción cotidiana para poder hacernos llegar los temas y las acciones que verdaderamente importan. Si tuviera que poner alguna pega es no haber continuado la historia de Gabrielle desde el momento en que se separa de Lestat, hubiera sido muy interesante conocer lo que ella ve y aprende por su cuenta en sus viajes.

Como siempre, gracias por leer, por estar ahí. Feliz domingo de lecturas. 

lunes, 31 de marzo de 2025

RESEÑA DE "MEMORIAS DE UNA GEISHA" DE ARTHUR GOLDEN Ed: Círculo de lectores

Resumen.  En esta novela nos encontramos a Chiyo, que nos cuenta, ya anciana, la historia de cómo se convierte en una de las grandes geishas de su tiempo. Chiyo es hija de una familia de pescadores que vive en una pequeña aldea. Un día, siendo aún muy joven, conoce al señor Tanaka, un hombre al que tanto ella como Satsu, su hermana mayor, son vendidas.  A Satsu se la llevan a una casa de prostitución y a Chiyo a una okiya en la que sirve como criada para, posteriormente prepararse para ser geisha.

Chiyo nos expresa en primera persona todo lo que siente y, nada más llegar a la okiya, sin saber muy bien qué va a ser de ella, solo desea escapar y volver a su casa, pero termina descubriendo que ya no tiene casa a la que volver, lo que le hace caer en gran desesperación ya que sus intentos por escapar parecen cerrarle las puertas del aprendizaje. Pero un día conoce a alguien por quien cambia radicalmente su actitud: el Presidente, un hombre por el que termina obsesionándose hasta el punto de proponerse convertirse en aprendiz y, posteriormente en geisha solo para estar cerca de él. A partir de este momento la novela nos muestra los diferentes momentos en la vida de una geisha a través de diferentes personajes, y las diferentes funciones que tienen en la sociedad: el entretenimiento, el baile, servicio del té, entre otras.

La novela se ambienta en el periodo de entreguerras y la época posterior a la segunda guerra mundial siguiendo en todo momento la vida de Chiyo y los ambientes en los que se mueve: el teatro, las fiestas, reuniones de hombres de negocios, el día a día en la okiya... A lo largo de la novela se nos muestra una historia en ocasiones muy dura, con maltrato físico y psicológico e incluso, en ocasiones, violencia sexual, que puede herir algunas sensibilidades. A pesar de todo, yo, que soy bastante sensible, he podido disfrutar la historia sin problema y me ha gustado mucho.

Respecto a la forma diría que me ha gustado mucho cómo, a pesar de los temas tan "turbios" o "escabrosos" de los que trata la novela, ésta está contada con una forma muy bella, regalándonos unos párrafos como los que pongo en el pie de foto del post publicado en instagram que pueden hacer que todo valga la pena. Golden nos relata una historia muy bien contada y cuidada que nos permite disfrutarla independientemente de los temas que trata.

La polémica de la publicación de Memorias de una geisha. Para finalizar esta parte me gustaría explicar, brevemente, para poner en contexto todo lo que se cuenta en la novela (introducción incluida), la polémica que rodea a la publicación del libro. Resulta que la obra se basa en las memorias de una mujer real, Mineko Iwasaki, cuya historia usa Golden para realizar su novela. Mineko había pedido al autor que no aparecieran en su obra ciertos detalles relacionados con un código de silencio que debían mantener las geishas respecto a algunas de sus prácticas, sin embargo, parece que Golden desoyó por completo esta petición e incluyó en la obra detalles que no debía incluir. Además, Golden, parece que había deshonrado la profesión mostrando a las geishas más como prostitutas, y esto se ve en el detalle del mizuage, que no se practicaba en Gion, la ciudad en la que se ambienta la novela, y ni siquiera lo practicó Mineko particularmente, y el hecho de que en la novela se ve cómo se relacionan algunos hombres con la protagonista llegando prácticamente a la violación, cosa que hubiera sido impensable. Por estos motivos, aunque el título sea memorias de una geisha yo cogería ese término "memorias" con muchas pinzas, e incluso leería el libro casi como enteramente ficción para sentirnos más cómodos con algunas cosas que ahí ocurren.

Aspectos formales del libro. Ya he mencionado que el libro tiene escenas muy duras y, sin embargo, está escrito con mucha delicadeza y belleza. Hay párrafos que hasta he señalado por lo bonitos que son. No sabría decir si son palabras de Mineko que transcribe Golden o si son de la invención del escritor, en todo caso, creo que a veces merece la pena leer el libro solo por estos párrafos que, como mencioné antes, pondré en el pie de foto porque son una maravilla.

Para terminar, como siempre, os preguntaréis ¿lo recomiendo? Sí para leer como ficción e, incluso, si se me permite, para entretenerte y salir de la rutina con un libro bien escrito con buena prosa y una historia bien narrada que, incluso tiene sus puntos de tensión narrativa y cierto lirismo, está más que recomendado. Como novela histórica o documentación de cualquier tipo yo cogería toda la información con pinzas y, si queréis contrastar, leería Vida de una geisha escrita por la propia Iwasaki que sí que cuenta su historia tal y como fue y las precisiones que Golden pasó por alto.

Como siempre, buena semana de lecturas. Nos leemos en la próxima reseña.


sábado, 25 de enero de 2025

RESEÑA DE "EL CONDE LUCANOR" DE DON JUAN MANUEL. Ed: ORBIS

 El conde Lucanor no es una novela, es un cuento de cuentos. Escrita en el siglo XII, El conde Lucanor es una historia en la que vuelan diferentes historias unidas por un hilo conductor: el conde Lucanor y su consejero Patronio. 

El conde Lucanor nos presentará diversos dilemas a lo largo del libro, dilemas sobre todo basados en problemas para con su gobierno y pedirá consejo a Patronio quien, a través de un cuento, le indicará la forma más sabia de proceder. 

Los dilemas que presenta el conde son, en esencia, de dos modalidades: moral y política. Moral por cuanto hay dilemas más relacionados con las relaciones personales del conde para con sus amigos, familiares, etc. con los que encuentra un problema en el que no sabe cómo proceder; políticos por cuanto algunos otros de los dilemas se relacionan con problemas de gobierno y cómo solucionar diferentes obstáculos que se le presentan en éste. 

En todos los casos, Patronio cuenta una historia en la que se presenta un caso similar al que propone el conde y finaliza con el consejo expresado en forma más llana.

Respecto a la estructura de la obra, si bien es un libro bastante corto, puede hacerse en algunos casos algo repetitivo ya que la estructura es siempre la misma para los 51 ejemplos o exiemplos que componen el libro: tenemos un título seguido de una introducción donde un narrador nos presenta el diálogo entre el conde y Patronio con una fórmula tal que así "hablaba el conde Lucanor con Patronio, su consejero, un día y díjole así" o alguna muy parecida, entonces, el conde expone su problema a Patronio y le pide que le aconseje, Patronio responde con una fórmula que introduce el cuento tal que así: "sabed cómo le aconteció a X  personaje con Y", a lo que el conde le responde que le cuente qué pasó y entonces ya sí Patronio te cuenta el cuento. Al final de este cuento, Patronio da de forma más clara el consejo resumiendo lo que venía a decir el cuento con una fórmula como esta: "y vos, señor conde Lucanor etc." y explica aquí el consejo y el capítulo termina siempre con una nueva fórmula en la que se cuenta que el conde al seguir ese consejo resuelve bien su problema y que don Juan (don Juan Manuel) entendiendo que era un buen ejemplo lo hace escribir y resume la moraleja en un par de versos "y porque don Juan tuvo éste por buen ejemplo, lo hizo poner en este libro, e hizo estos versos, que dicen así:".

Toda la obra tiene este mismo esquema y es comprensible que, en algunos casos, se nos haga algo repetitivo leer este libro. 

Temas. Algunos de los temas más importantes del libro son:sobre cómo hablan más de nosotros nuestras acciones que nuestras palabras. Este es un tema muy recurrente en los cuentos e incluso el refranero español tiene varias sentencias al respecto, pero no deja de ser muy interesante que esta historia mantenga su actualidad más en un mundo donde aún las apariencias y los discursos valen más en ocasiones que las acciones de las personas.

La importancia de la bondad al margen de la riqueza. Este tema es de los que más se repiten en los cuentos de El conde Lucanor y es que no podemos perder de vista que se trata de aconsejar a un personaje poderoso que tiene (habitualmente) riquezas y poder sobre otras personas y no es de extrañar que don Juan Manuel, a través de Patronio insista mucho en cómo la riqueza y el poder no sirven de nada si no se usan para el bien. Además el bien debe hacerse por el propio bien sin esperar recompensa alguna, no olvidemos que estamos en un reino cristiano muy religioso y Dios está por encima de condes y reyes, y Dios nos va a juzgar por nuestras obras y no por nuestras riquezas, que se insista tanto en este tema no deja de ser síntoma de que estamos en una sociedad en la que, a veces, a aquellos que tienen poder y riqueza abusan de su condición y el único mecanismo para disuadir a esta clase social de estos abusos es asustándoles con el omnipotente.

En relación con el tema anterior también se nos trata el tema de que el bien siempre vence al mal. Hoy en día tenemos visiones muy distorsionadas de lo que es el bien o el mal, es más hay gente que ni siquiera cree que exista un Bien (con mayúsculas) o un Mal (en mayúsculas), ya que vivimos en un relativismo moral continuo que termina derivando en que ni uno ni otro existen y, si existieran, no importaría. Para estos tiempos, el cuento sobre el bien y el mal es uno de los ejemplos más bonitos y esperanzadores del libro (si bien puede que también algo ingenuo) pues trata sobre cómo el Mal a pesar de todos sus engaños, trampas y maniobras para engañar al Bien, éste siempre encuentra el modo de evitar el daño porque siempre actúa haciendo el bien, como si el Bien fuera una fuerza natural que cae por su propio peso, como ocurre precisamente con el Mal.

Otros temas, como he mencionado antes, están más relacionados con la estrategia de gobierno: si es más ventajosa una guerra con el vecino o una alianza, qué hacer con vasallos desobedientes, cómo casar bien a los parientes teniendo en cuenta tanto la posición social como el carácter del pretendiente, etc. que nos muestran algunas pinceladas sobre cómo se pensaba en el siglo XII en Castilla. 

Bonus: Saladín, la estructura de la obras y las maqamat.

Ha sido muy curioso encontrar en los capítulos 25 y 50 del libro un personaje que se repite: Saladín. Este personaje es usado en dos ejemplos por Patronio y, en cada cuento, vive una aventura diferente y esto ha llamado la atención porque en las maqamat solemos tener, además de las historias dentro de historias con versos, un personaje constante del que se cuentan diversas aventuras. En general, la estructura de El conde Lucanor guarda similitudes más que estudiadas con este género narrativo árabe, en particular esa estructura tan repetitiva proviene precisamente de este género, además de los versos que cierran cada capítulo, el hecho de que además haya dos capítulos con un mismo protagonista también da que pensar sobre las relaciones con este género, pero no voy a profundizar aquí en eso porque esto es solo una reseña y no hay espacio para tanto, pero sí quiero dejar patente que esta obra es solo la continuación de una tradición que también se estaba dando en árabe y hebreo por toda la península ibérica.

Pero vamos a lo importante para vosotros, ¿por qué recomendar leer este libro? El conde Lucanor es una obra imprescindible para entender parte de la narrativa de la edad media en la península ibérica y posterior en el siglo de oro. Es, además, una obra referente a nivel cultural pues es un ejemplo de la coexistencia y convivencia de las llamadas "tres culturas" en la península ibérica: árabe, judía y romance por compartir rasgos culturales, temáticas y estructuras de las tres, lo cual es la expresión de cómo la península ibérica ha sido un fenómeno casi único en Europa de coexistencia, convivencia y combinación cultural. Por último, es una obra entretenida y amena que puede disfrutarse a cualquier edad y casi en cualquier momento vital.

Recomendaciones finales. Como mencionaba al inicio, esta obra es muy ligera de leer precisamente por tratarse de pequeños cuentos independientes, en general bastante cortos, si bien recomendaría que buscaran una buena edición, bien adaptada al castellano moderno o bien anotado. La edición que yo he manejado estaba en castellano antiguo con muchos latinismos y palabras en desuso, algunas he tenido que investigarlas otras me las figuraba, pero eso ha hecho la lectura más incómoda por lo que no recomiendo la edición de Orbis que muestro yo. Cátedra suele hacerlo bien en este sentido, es muy buena editorial y seguro que se lee muy bien en ella. Alianza es también una editorial aconsejable para este tipo de libros, no son caras y suelen contar con buenas introducciones sobre el contexto del libro para hacer la lectura más agradable y completa.

 Y ustedes, ¿qué están leyendo este fin de semana?